jueves, 28 de mayo de 2015

El cliente siempre tiene razón


Técnica mixta (100x81cm)


Qué barato se cotiza
quien por barato tiene tu trabajo,
quien reduce a palabras un poema,
porque tu entraña misma prostituye.

Huecos parloteos grises;
plumas de pavo real coloreadas
con verde desmesura y con vacío
y una sordera crónica en el alma.

"Dime alguna cifra, venga;
quiero cuarto y mitad de eso tan caro";
faltas de ortografía en la cartera,
y un menosprecio macho por delante.

Estrategias de "marketing";
marchando"hecho a sí mismo" y poco hecho
para esa hambrienta élite asquerosa.
Estoy segura: aquí llegarás lejos.



lunes, 25 de mayo de 2015

Identidades


Acrílico sobre madera (30x30cm)


Me sentaré un segundo;
esperaré a que pase
el pensamiento.
Y cuando me abandone
toda idea
volveré a formar parte
de este circo. 


martes, 12 de mayo de 2015

Falso autónomo de baja laboral


Técnica mixta sobre tabla (30x30cm)

Tras la resaca expositiva ya estamos otra vez por aquí, al pie del cañón, porque precisamente de pies va la cosa hoy. Y es que: ¿Pueden los pies expresar algo plásticamente, más allá del mero apunte académico? ¿Y socialmente? ¿Me puedo quejar con los pies, claro está, sin que para ello sufra la pituitaria del prójimo? ¿Tendrán la misma versatilidad expresiva que sus endiosadas compañeras, las manos? ¿O acaso habrán de conformarse con asumir su ingrata tarea de comer polvo a cada paso y de soportar nuestro peso? Pues no sé la respuesta a tanta pregunta, la verdad, pero tampoco me importa demasiado, pues al fin y al cabo esto no es más que un experimento. Además nunca he tenido del todo los pies en el suelo, así que qué sabré yo...

Verborreas aparte, sepan que este título inicialmente se pensó como parte de las Nueve Musas que llevé a la pasada muestra Vorágine (seguramente las recuerden de entradas anteriores), pero se quedó fuera por varias razones y decidí darle forma después con algo más de espacio.

¿Qué me dicen? Viendo al protagonista de la obra ¿no les apetecería un largo y relajante descanso? ¿Una cabezadita aunque sea? ¿No?
Ay, si es que se me quejan de vicio.

Nada más, quedo a sus pies, señores.