No se engañen, señores, que este guapo personaje de sombrero cordobés poco o nada tiene que ver con la famosa peli de Buñuel. Cierto es que su expresión tampoco parece rebosar salero y alegría, pero es curioso comprobar cómo cualquiera que lleve un sombrerito así y topos de colores puede resultar automáticamente flamenco y fiestero, aunque el cánido en cuestión tenga más cara de inspector de Hacienda que otra cosa.
Hice esta ilustración hace unos días a modo de ejercicio, más que nada para ver cómo podía componer una cara a base de manchas y para experimentar un poco con diferentes texturas (el sombrero es de fieltro y el fondo es de cartón). Espero que les divierta.
Pues nada, que pasen un feliz martes y a mis paisanos les deseo un feliz Día de Canarias (lo del ambiente andaluz es más que nada para llevar la contraria y despistar un poco, jojojo)
¡Arsa!